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La arcilla como material de construcción: respetuoso con el clima, circular y limpio

La arcilla en plena forma

La arcilla es una mezcla de componentes arcillosos y arenosos que puede considerarse un mortero natural. Está compuesta por diminutas partículas en forma de plaquetas que, al mezclarse con agua, se deslizan unas sobre otras, volviéndose plástica. Cuando el agua se evapora, las plaquetas se atraen entre sí, creando una resistencia natural suficiente para muchas aplicaciones en construcción.

Una gran parte de los materiales de construcción que se emplean cada año se destinan a este fin, sobre todo en construcciones nuevas, reformas y modernizaciones, lo que se conoce como construcción en estructuras existentes.

En interiores, los materiales de construcción de arcilla se utilizan en forma de ladrillos, morteros, revocos de base y de acabado, así como paneles de arcilla. Todos ellos están regulados por modernas normas DIN. Otros usos relevantes son los revestimientos y los enlucidos decorativos.
Además, la construcción portante con arcilla está cobrando fuerza: la nueva norma DIN 18940 regula la utilización de bloques de tierra portantes para edificios de hasta 13 metros de altura (cuatro plantas).

1. Disponibilidad

Material de construcción = materia prima

La arcilla es una materia prima casi inagotable, presente de forma natural en el suelo. En el caso de ClayTec, no se excavan pozos específicos para extraerla: se aprovecha arcilla secundaria, una capa superficial que se genera durante la extracción de grava y arena. Un residuo potencial que se convierte en un recurso.

Fácil obtención

Una gran parte de los suelos del planeta contiene arcilla. Se trata de un recurso natural abundante que, si no se aprovechara, acabaría desechado. ClayTec utiliza materiales que ya están disponibles, evitando la creación de impactos adicionales.

Distancias cortas

Las materias primas utilizadas en los productos de ClayTec provienen, en su mayoría, de las zonas cercanas a sus centros de producción.
Esto implica rutas de transporte muy reducidas, lo que se traduce en:

  • Menor consumo de energía fósil
  • Menor impacto en el paisaje
  • Menores emisiones asociadas a la logística
  • Reducción de los costes de producción

Este enfoque favorece un perfil ambiental más favorable para el producto final.

Cadenas de suministro sencillas

La sencillez compositiva es otra ventaja: muchos productos están elaborados con solo tres ingredientes básicos —arcilla, arena y paja— sin necesidad de aditivos químicos.
Esto garantiza:

  • Procesos de fabricación no complejos
  • Mayor seguridad del suministro incluso en contextos críticos (como ocurrió durante la pandemia)
  • Cumplimiento de normas ecológicas y sociales de forma más transparente

La arcilla es, hoy más que nunca, un material constructivo con presente y futuro. Su versatilidad, sostenibilidad y disponibilidad la convierten en una alternativa real para quienes buscan edificar de manera más saludable, eficiente y respetuosa con el entorno.

2. Baja energía: clave en los materiales de construcción sostenibles

Reducción del consumo energético en la producción de materiales

El consumo de energía en la fabricación de materiales de construcción representa una de las principales fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero y determina en gran medida su huella de carbono. El tiempo apremia: según el Informe sobre la situación mundial de la edificación y la construcción del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, el sector de la construcción genera el 40 % de las emisiones globales de CO₂.

En este contexto, los materiales de construcción naturales, como la arcilla, se posicionan como una alternativa más ecológica. Algunos productos de ClayTec van incluso más allá, ya que gracias a su contenido en fibras vegetales, no solo reducen emisiones, sino que también actúan como sumideros de carbono.

Materiales de construcción con consumo energético mínimo

El mortero de arcilla natural y otros materiales arcillosos pueden fabricarse, almacenarse y aplicarse sin necesidad de secado industrial. El contenido de humedad de la materia prima —lo que conocemos como tierra húmeda— se conserva, reduciendo al mínimo el consumo energético en todo el proceso.

La mezcla de arcilla con arena y paja puede realizarse utilizando motores eléctricos alimentados por energías renovables, como la energía solar, lo que convierte esta solución en una de las más limpias y sostenibles del mercado.

Secado a baja temperatura sin combustibles fósiles

En los casos en que es necesario secar el mortero de arcilla —según el tipo de maquinaria o método de aplicación—, este proceso puede realizarse a bajas temperaturas. A diferencia de los materiales que requieren cocción o tratamientos térmicos intensivos, la arcilla no necesita altas temperaturas para endurecerse.

Además, este secado puede llevarse a cabo al aire libre o con energía solar, evitando el uso de energía fósil y reduciendo significativamente la huella de carbono del proceso productivo.

3. Circularidad: materiales de construcción que vuelven al origen

Una verdadera economía circular en la construcción

Uno de los factores más decisivos para lograr una construcción sostenible es el potencial de recuperación de los materiales empleados. A diferencia de muchos materiales minerales que, tras su vida útil, solo pueden ser triturados para usos secundarios (lo que técnicamente sería downcycling), los materiales de construcción a base de arcilla pueden reutilizarse o reciclarse directamente, manteniendo su calidad y propiedades.

Adhesión soluble en agua y recuperación total

Los materiales de construcción con base arcillosa se ligan al agua, lo que significa que incluso tras décadas de uso pueden rehidratarse, moldearse de nuevo o reutilizarse. Esta solubilidad en agua les otorga un potencial de recuperación único, y los convierte en productos ideales para una verdadera economía circular tipo C2C (cradle to cradle o “de la cuna a la cuna”).

En este sentido, los productos de arcilla de ClayTec permiten construir sin residuos. La reversibilidad de los sistemas constructivos basados en arcilla es una de sus mayores ventajas en comparación con otros materiales.

Sin combustión ni procesos energéticos intensivos

A diferencia de los aglutinantes minerales tradicionales —como el cemento—, que requieren procesos de cocción intensos, la arcilla se endurece simplemente secándose. No hay combustión ni transformación química destructiva: la arcilla conserva su estructura y, al no alterarse, puede ser devuelta a su estado inicial con solo añadir agua.

Esto evita el gasto energético del ciclo típico de calcinación, molienda y nuevo fraguado químico, haciendo de la arcilla una opción verdaderamente baja en emisiones.

Reciclaje abierto y compatibilidad cruzada

La arcilla es un material de construcción completamente reciclable y con gran versatilidad. No solo puede reutilizarse directamente, sino que también puede convertirse en otros materiales de construcción compatibles. Por ejemplo, se puede transformar un mortero de arcilla grasa en uno magro añadiendo arena o áridos reciclados, o preparar una placa compacta de arcilla a partir de un mortero seco.

Esta compatibilidad cruzada permite adaptar el material a nuevas funciones y proyectos sin generar residuos. Si los restos se recuperan en seco, incluso se puede obtener una premezcla reutilizable lista para aplicar.

Separación pura y desmontaje sin residuos

Otra gran ventaja de la arcilla es que permite uniones completamente reversibles. Un revoque de arcilla puede retirarse con agua sin dañar la superficie base; los ladrillos colocados con mortero de arcilla pueden desmontarse y reutilizarse, cosa que no ocurre con morteros de cemento.

Además, hasta los componentes más finos, como la arena, pueden separarse y recuperarse después de décadas de uso. Esta separabilidad pura permite no solo reutilizar la arcilla, sino también facilitar la recuperación de otros materiales, promoviendo la circularidad en el conjunto del sistema constructivo.

4. Saludable: materiales que cuidan de ti y de tu espacio

Bienestar interior con materiales saludables

Los materiales de construcción de arcilla destacan no solo por su sostenibilidad, sino también por sus propiedades beneficiosas para la salud. En un contexto donde pasamos más del 80% del tiempo en espacios interiores, el clima interior saludable es una necesidad y no un lujo.

La arcilla tiene la capacidad de absorber el vapor de agua del ambiente y liberarlo cuando el aire está seco, contribuyendo a mantener una humedad relativa óptima. Esta cualidad higroscópica se debe a su estructura de microplaquetas con una enorme superficie interna activa.

Filtrado natural de contaminantes y olores

Otra ventaja crucial es su capacidad de actuar como filtro natural: retiene y neutraliza contaminantes y olores, contribuyendo a mejorar la calidad del aire interior. Esta característica es especialmente importante para personas con alergias, asma o sensibilidad química múltiple.

Además, su superficie porosa y abierta a la difusión permite un intercambio constante con el entorno, reduciendo el riesgo de formación de moho. Gracias a esto, la arcilla es una aliada ideal para crear hogares y espacios más sanos y respirables.

Aislamiento térmico natural en verano e invierno

La masa térmica de los materiales de arcilla actúa como almacén de calor, regulando las temperaturas interiores durante todo el año. En verano, refresca los espacios, y en invierno, conserva el calor durante más tiempo.

Esta capacidad de igualar las oscilaciones térmicas permite crear un ambiente térmicamente estable, reduciendo la necesidad de climatización artificial y mejorando el confort de manera natural.

Todo esto se logra sin consumo energético adicional, y sin sistemas complejos. Es un ejemplo perfecto de lo que se conoce como «baja tecnología» efectiva.

Aislamiento acústico y confort sonoro

La acústica interior también influye directamente en la sensación de bienestar. Las placas de construcción de arcilla permiten construir paredes secas con excelente aislamiento acústico, reduciendo la propagación de ruidos entre estancias.

Además, las superficies de arcilla reflejan menos ruido que los materiales rígidos como el hormigón, ayudando a crear espacios más tranquilos y agradables.

Control térmico eficiente con sistemas radiantes

La arcilla es también un excelente soporte para los sistemas murales de calefacción y refrigeración radiante. Su capacidad de difusión natural y su masa térmica permiten una distribución uniforme del calor.

Estos sistemas funcionan con baja temperatura de impulsión, lo que aumenta notablemente la eficiencia energética de bombas de calor y reduce el consumo total. El resultado: confort térmico con un impacto ambiental mínimo.

5. Histórico: renovar con responsabilidad, construir con memoria

La arcilla, un material esencial en nuestro patrimonio arquitectónico

Durante siglos, la arcilla ha sido un material clave en la construcción tradicional en casi todas las regiones del mundo. Este recurso natural ha formado parte de muros, rellenos, techos, revocos y acabados interiores, y todavía hoy está presente en un gran número de edificios históricos.

En muchos casos, su uso se encuentra oculto a simple vista, por ejemplo, como relleno de techos o tras los revestimientos modernos. La construcción con tierra cruda ha sido fundamental para levantar viviendas, edificios administrativos, almacenes, graneros y hasta construcciones religiosas, combinando funcionalidad, bajo impacto ambiental y durabilidad.

ClayTec: más de 40 años conservando con arcilla

Desde hace más de cuatro décadas, ClayTec trabaja intensamente en el ámbito de la conservación del patrimonio arquitectónico, especialmente en la rehabilitación de casas con entramado de madera. Su experiencia y compromiso con la restauración respetuosa le valieron el prestigioso Premio Alemán a la Protección de Monumentos en 1997, en reconocimiento a su labor.

Gracias a su especialización, ClayTec ha desarrollado un catálogo técnico y auténtico para la renovación de estructuras históricas con arcilla, incluyendo soluciones específicas para revocos, rellenos, aislamiento y acabado, siempre con el máximo respeto por los materiales y técnicas originales.

Renovación de entramados de madera: materiales auténticos para soluciones duraderas

La rehabilitación de estructuras de madera requiere materiales compatibles, estables y duraderos. Los productos de ClayTec, como los ladrillos de arcilla cruda y morteros de relleno específicos, se han utilizado durante décadas en proyectos de conservación exitosos, demostrando su eficacia tanto técnica como estética.

Para las fachadas exteriores, la empresa ofrece revocos de cal hechos a medida, mientras que para los interiores propone soluciones completas de aislamiento térmico y revocos de arcilla que respetan la estética tradicional y mejoran el confort térmico y acústico.

Además, se cuenta con productos adecuados para renovar techos y elementos horizontales en casas con estructura de madera, asegurando la cohesión entre los elementos constructivos antiguos y las soluciones actuales.

Aislamiento interior eficaz sin alterar la fachada original

En muchos edificios con valor histórico, la conservación de la fachada original con entramado visto es una exigencia legal o patrimonial. En estos casos, el aislamiento interior se convierte en la mejor alternativa para mejorar la eficiencia energética sin comprometer la imagen exterior.

ClayTec ofrece diversas técnicas de aislamiento interior diseñadas específicamente para este tipo de estructuras. Estas soluciones son seguras, eficaces y tolerantes a errores, tanto en la planificación como en la ejecución. Además, su comportamiento higrotérmico contribuye a regular la humedad, lo que prolonga la vida útil de la madera y evita patologías comunes en edificios mal aislados.

Una ventaja destacable del aislamiento interior es su capacidad para calentar rápidamente los espacios, algo especialmente útil en viviendas tradicionales. También se integran perfectamente con sistemas de calefacción de superficie en paredes, proporcionando un confort uniforme y natural.

Conservación de monumentos históricos con soluciones reversibles

La restauración de edificios históricos debe hacerse con el máximo cuidado, buscando siempre soluciones que sean tanto efectivas como reversibles y respetuosas con el edificio original. Los productos de arcilla de ClayTec responden perfectamente a esta necesidad.

Gracias a que la arcilla es soluble en agua, los elementos constructivos pueden desmontarse, readaptarse o retirarse sin dañar la estructura ni alterar sus características originales. Esto es especialmente valioso en intervenciones donde la reversibilidad es un requisito, ya que permite actuar con flexibilidad y precisión sobre elementos sensibles.

Además, la naturaleza maleable de la arcilla permite ajustarse a las particularidades de cada edificio: propiedades del soporte, exigencias legales, compatibilidad con materiales existentes, etc. Esta versatilidad convierte a la arcilla en una de las mejores opciones para la rehabilitación patrimonial.

Un enfoque integral: restaurar, conservar y mejorar

ClayTec no solo ofrece materiales de construcción con base en arcilla, sino que pone a disposición de arquitectos, técnicos y restauradores un enfoque integral para la conservación del patrimonio edificado. Sus productos y soluciones están pensados para mejorar la eficiencia energética, garantizar el confort interior y respetar al máximo el valor histórico de cada inmueble.

La combinación de aislamiento eficaz, compatibilidad técnica y bajo impacto ambiental convierte a los productos ClayTec en aliados indispensables en intervenciones sobre edificios protegidos, casas tradicionales o monumentos históricos.

En resumen, renovar con arcilla es hoy más que nunca una forma de construir con memoria, responsabilidad y futuro, manteniendo viva una técnica milenaria que sigue ofreciendo respuestas eficientes y sostenibles a los retos contemporáneos.

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